Soy una chica que siempre ha estado "gordita".
En el instituto pesaba 75 kilos, en esa época hice varias dietas, pero lo único que conseguí fue el efecto yo-yo.
Después, en la universidad, engorde hasta los 90 kilos. Poco a poco he conseguido adelgazar y mantenerme entre los 64-66 kilos.
Me encanta comer, el dulce me flipa y aún estoy aprendiendo a controlarme y a no atiborrarme, sobre todo los fines de semana o cuando no estoy al 100%.
He aprendido a ignorar mis complejos, y ya puedo decir que soy feliz y que disfruto de la comida.
|